Sacrificio II
He pensado en tu propuesta,
ese contrato blindado
de vivir cerca de la cola de caballo
y el grillo.
La de lanzar por la ventana
todas las pretensiones
caníbales.
Te parece bien,
la maleta de un silencio,
una renuncia hecha tejano;
que guise todas las flores para nosotros,
que abra libros
esperando que caigan semillas
y me embadurne de pecas
como una viejo cetáceo
que se le oscurece la piel
de tanta vida
en forma de algas.
Tal vez el viaje ha terminado,
es una lucha constante
entre la búsqueda del conocimiento
o simplemente dejar que Loto
sea Primavera.
Con besos y una acequia
una respira la paz
que hubo después de la guerra.
Una sueña
que quizás los castillos
tengan almenas hirientes
y una silla de PVC
con el respaldo de tu espalda
sea más confortable
que todos los focos del mundo.
Por eso te pido que en esta travesía
no olvides que mi billete
es de vuelta.
ese contrato blindado
de vivir cerca de la cola de caballo
y el grillo.
La de lanzar por la ventana
todas las pretensiones
caníbales.
Te parece bien,
la maleta de un silencio,
una renuncia hecha tejano;
que guise todas las flores para nosotros,
que abra libros
esperando que caigan semillas
y me embadurne de pecas
como una viejo cetáceo
que se le oscurece la piel
de tanta vida
en forma de algas.
Tal vez el viaje ha terminado,
es una lucha constante
entre la búsqueda del conocimiento
o simplemente dejar que Loto
sea Primavera.
Con besos y una acequia
una respira la paz
que hubo después de la guerra.
Una sueña
que quizás los castillos
tengan almenas hirientes
y una silla de PVC
con el respaldo de tu espalda
sea más confortable
que todos los focos del mundo.
Por eso te pido que en esta travesía
no olvides que mi billete
es de vuelta.
Comentarios
Publicar un comentario