SICILIA Y EL CUENTO DE PARNASS
I
Las princesas raras
se aislan en castillos,
en casas pináculos
que parecen torres de defensa,
o mejor aún,
el cohete volador.
Segorbina toda ella
un cactus protege la entrada,
la vivienda de calza de media,
de bufanda de lana,
de tira de cartón
sobre una calle de maza-pan.
Las princesas raras
les gustan tener al dragón con correa atado a la puerta,
chinchetas por setas
y cuando se enojan mandan
cazar nubes con abanicos
para meterlos en un baúl cromado.
II
Poeta masculino de testosterona
tú que amas sin control
te da lo mismo nenúfar en mano,
soneto o espinela,
verso libre o pareado siamés.
En cambio nosotras...
Las poetas vaginas parimos garra,
somo de ley abanderadas,
cuando amamos
nuestro poema
es neto,
nardo,
es heroína diluida
en torrente sangría,
letra con puño
se clava el filo
debajo de las uñas,
riza la pestaña
y ama,
ama hasta que el tornillo se afloja del halón de una nave industrial
y los tobillos se desvanecen.
los poetas que escriben para seducir damas
que busquen consuelo en la lavandería
porque no vuelvo a ser sinalefa
de ninguno de ellos,
porque...las princesas raras no creen ya en los cuentos,
un poeta sin sal los ha matado por encargo siciliano.
Las princesas raras
se aislan en castillos,
en casas pináculos
que parecen torres de defensa,
o mejor aún,
el cohete volador.
Segorbina toda ella
un cactus protege la entrada,
la vivienda de calza de media,
de bufanda de lana,
de tira de cartón
sobre una calle de maza-pan.
Las princesas raras
les gustan tener al dragón con correa atado a la puerta,
chinchetas por setas
y cuando se enojan mandan
cazar nubes con abanicos
para meterlos en un baúl cromado.
II
Poeta masculino de testosterona
tú que amas sin control
te da lo mismo nenúfar en mano,
soneto o espinela,
verso libre o pareado siamés.
En cambio nosotras...
Las poetas vaginas parimos garra,
somo de ley abanderadas,
cuando amamos
nuestro poema
es neto,
nardo,
es heroína diluida
en torrente sangría,
letra con puño
se clava el filo
debajo de las uñas,
riza la pestaña
y ama,
ama hasta que el tornillo se afloja del halón de una nave industrial
y los tobillos se desvanecen.
los poetas que escriben para seducir damas
que busquen consuelo en la lavandería
porque no vuelvo a ser sinalefa
de ninguno de ellos,
porque...las princesas raras no creen ya en los cuentos,
un poeta sin sal los ha matado por encargo siciliano.
"los poetas que escriben para seducir damas
ResponderEliminarque busquen consuelo en la lavandería
porque hoy no vuelvo a ser sinalefa
de ninguno de ellos,"...
Muy..."edificantes" esos versos...ajajajajaja
Me ha encantado, "poeta de vísceras", que llama al pan...pan y al vino...vino....