Test de velocidad
Existen fábricas preparadas para medir
la resiliencia de los cachivaches y
su reacción ante el devenir de cada lluvia, toque o caricia.
De todas formas, no hace falta ser un gran científico
para saber que una mousse o un trozo de roble
es diferente y sin embargo ambos son personas.
En salas de cortinas mostazas
van ensayando con sus autómatas
y muelles y botonaduras y ascensores
la valía cuestionable
de su peso
con la cantidad de contactos.
Los coches, las lavadoras y los rompetechos
tienen un tiempo específico
para soportar cada inclemencia.
La cronología de los embistes.
La protección de las manos.
¿Cuánto amor resiste una piedra?
¿Arde un libro igual si es bueno o malo?
¿Puede amar quién ahogó su alma en un vaso de bourbon?
Los entendidos azotan con ahínco
cada respuesta y apuntan en cuadernos
su índices inconexos.
Y diseñan corazas para la futura carne.
De un corazón de un "crash test dummy"
que no siente
el más mínimo remordimiento
al colisionar con otro corazón.
Obra pictórica "El baño del niño" (1893) de Mary Cassat.
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