Poliquímica

Sin duda, erré en la profesión
tendría que haber sido anestesista
y colocar oxígeno en la Moncloa-ca.
o mejor, aún,
químico, sí,
un monstruoso científico con bata blanca,
con cien ayudantes con bata blanca
y dos guardaespaldas
en la entrada de mi guarida.

Ellos, por supuesto, con pasamontes
de punto y metralletas
con nombre de vodka.

En un laboratorio
fabricando pastillas de colores,
para repatirlas por la calle,
calle usted, señor caballeriza y ...

La azul es la dislexia,
soñarás con príncipes sin cabeza,
la verde, oh la verde,
creerás que eres el increíble Hulk
y te irás de plató en plató
mirando catálogos de deportivos italianos,
el rojo, la roja, la de la estampación
de la sangre del pueblo
que agónico hace transfusiones.

Me haré millorario,
y venderé política
encapsulada
en la puerta de los restaurantes,
en los clubs de golf y alterne,
en la salida de las cárceles.

Traficante de
metásfora,
alegorsis,
hipérbolen,
epiteto sexual
estimulando el power fuck :

Oh eres una mariposa
de un sólo día.

El químico más feliz de la tierra batida, la televisión
con mi propia campaña.
Las ilusiones de morir e ir al cielo.

temo el golpe de está a dos
temo el golpe de está a tres
temo el golpe de está a cuatro
temo el golde de estar a cinco.

Porque no hay peor droga que la política. He dejado de creer en la poliquímica.








Comentarios

Entradas populares de este blog

Reseña de "Hasta dónde el daño" de Fer Gutiérrez

Ánima-les

Reseña "Piscina del Oeste" de Ágata Navalón