NISPEROS
Sabíamos
que nuestra amnistía
era un panfleto.
Recuerdas...
el paseo bordando el mar,
tú en bicicleta pedaleabas la brisa
y andando subía yo a la cuesta de tus ojos.
Recuerdas...,
me enseñaste a distinguir entre el canto del cuco y de la tórtola
entre las zarzas y los nísperos celosos,
educando el caos de mi locura cuerda.
Recuerdas...
La tormenta nos presentó en medio de un naufragio,
menguando nuestra luna-balsa...
Por amor reniegas
y te has ahogado
para salvar
mi cuerpo del oleaje.
La conexión ha terminado.
No perdonas la traición.
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