«nos hemos habituado / a la guerra» Lluïsa Lladó «Una identidad obligada a alterarse y adaptarse en un entorno hostil para sobrevivir» Patricia Crespo El tiralíneas de plomo no es un poemario. No es un libro lírico. Es poesía. Poesía como atmósfera vital, cualidad del ser, del ser mujer superviviente e insurrecta. Poesía como lugar en pie de paz y justicia. Poesía para la verdad de los abatidos bajo el plomo. Aquí, en El tiralíneas de plomo, en poesía , la importancia de no aceptar la violencia como empresa, comunicación, cultura. Unas líneas, multiplicidades, identificaciones, desde las líneas defensivas, desde las líneas que se salen del territorio ocupado, invadido, arrasado del lenguaje, la estÉtica, el crear puntos de fuga para un presente malherido. «Y un concierto mudo / nos declina a cualquier intento / de ofensiva.» Es el turno de los ofendidos, que diría Roque Dalton, y la poesía está ofendida. Este no es un poemario, es una insurrección, es una avanzadilla entre c...